Hiparquía de Tracia (o Hiparchia, o Hipparchia en versión inglesa) fue una filósofa griega (aproximadamente del S. III a. C.) perteneciente a la escuela de los Cínicos. Tuvo una biografía cuando menos curiosa; Luego de ver el vuelco que da la vida de su hermano Metrocles después de tener a Crates como maestro, Hiparquia se decide ir a conocerlo.
Lo ve y el enamoramiento es casi instantáneo pero a su familia, perteneciente a la aristocracia, no le gusta nada esto y trata de impedir la relación. Hiparquía entonces amenaza con suicidarse si no se casa con su amado por lo que sus padres suplican a Crates que haga entrar en razón a su hija. Crates la intenta disuadir, y no se le ocurre otra cosa que desnudarse ante ella y mostrar sus defectos físicos ( era jorobado) -He aquí el esposo, he aquí sus posesiones: decide; pues no podrás ser mi compañera si no compartes mi modo de vida.
Pero Hiparquía, no sabemos si impresionada por sus "posesiones", quien sabe :-) , no sólo no cambia de opinión sino que hizo lo mismo (desnudarse y mostrar sus "posesiones") y se marcha con Crates, casándose más tarde en una boda, cínica por supuesto. Crates e Hiparquia consuman su matrimonio haciendo el amor en un portal público. Con su acto público, reforzaban la enseñanza cínica por la cual cualquier acción suficientemente virtuosa como para llevarse a cabo en privado, no sería menos virtuosa en público (principio de anaideia)
Bueno pues toda esta culturilla viene a cuento porque Hiparquia dió también su nombre a un género de mariposas (familia Nymphalidae, subfam. Satyrinae) y hoy os voy enseñar una de ellas.
El género incluye varias especies bastante similares entre si (y similares a otros géneros afines también), espero no haberme confundido con la identificación, que me ha resultado un dolor de cabeza, porque yo realmente no veo tan claras las diferencias.
Al final creo que la de la foto es el sátiro común, Hipparchia semele
Es una mariposa grande, de hasta 6 cms de envergadura alar (aunque más pequeña que H. fagi o H. alcyone), muestra sobre cada ala delantera dos ocelos negros con centro claro (en la imagen sólo se ve uno), insertos en una banda anaranjada que destaca sobre el marrón de las alas, más visible en las hembras que en los machos (por lo que supongo que entre eso y la banda lanca más marcada, la de la foto será una hembra)
Al igual que buena parte de las mariposas del género Hipparchia, presenta en el reverso de las alas tonalidades marrones y grisáceas, en confusa mezcla, destacando, en reposo, un único ocelo (hay que fijarse bien)
Es una mariposa de amplia distribución y común en lugares herbosos y abiertos, y en brezales, hasta los 1500 metros de altitud. Es posible verla sobre las flores del tomillo, pero su posición normal de reposo es en el suelo, con las alas cerradas y apuntadas hacia el sol. Bonita,¿verdad?
Las orugas son amarillas, con rayados marrón y amarillo mate. Se alimenta de diversas hierbas, y supera el invierno a medio crecimiento.
Su conducta fue ampliamente estudiada por Nikolaas Tinbergen, científico holandés nacido a principios del siglo XX, etólogo y Premio Nobel de medicina en 1973, quien observó que durante los días soleados el macho (de tamaño algo menor que la hembra) se coloca en un observatorio que ha elegido previamente, normalmente en el suelo, y permanece absolutamente inmovil hasta que detecta la presencia de otra mariposa.
En ese momento inicia un repentino vuelo en dirección al invasor. Si se percata de que se trata de un ejemplar de otra especie normalmente interrumpe la persecución, pero si es una hembra la persigue sin tregua hasta que ésta opta por pararse.
Entonces el macho hace lo propio y se aproxima a pie hacia aquella, el macho comienza a ejecutar una complicada parada nupcial en la que se pasea en torno suyo, realiza movimientos espasmódicos con las alas o signos con las antenas, que son respondidos por la pretendida.
Dentro de este ritual, Tinbergen descubrió que, en un momento dado, el macho acogía entre sus alas anteriores las antenas de la hembra, descubriendo posteriormente que con ello le estaba facilitando a esta la posibilidad de establecer contacto "olfativo". Si todo funciona a gusto de ambos, se inicia la cópula.
Pero (siempre hay un pero) resulta que la hembra se aparea una sóla vez y el macho, hasta que no es admitido o rechazado no está en condiciones de saber si su pretendida es o no "virgen".
Analizado este comportamiento por Tinbergen, descubrió que todo el comportamiento de persecución era de carácter sexual (si las hembras sólo se aparean una vez es fundamental ser el 1º en pillar) y que dentro de éste el macho de Hipparchia semele responde a estímulos visuales. Sometió en miles de ocasiones a machos de semele al experimento de acercarles mariposas de papel (luego sólo serían meros papeles de diferentes tamaños y colores) sujetas con un hilo a un bastón de aproximadamente un metro de longitud y conseguía que los incautos machos cayesen en la trampa.
De este modo se explica que cuando desde su observatorio descubre la proximidad de otro lepidóptero (u otro insecto o los papeles de colores) se abalanza sobre el visitante no por instinto territorial o de defensa, sino porque cree identificar a una posible compañera con la que aparearse. Muy de acorde con el caracter de Hiparquia no? :-))
Lo ve y el enamoramiento es casi instantáneo pero a su familia, perteneciente a la aristocracia, no le gusta nada esto y trata de impedir la relación. Hiparquía entonces amenaza con suicidarse si no se casa con su amado por lo que sus padres suplican a Crates que haga entrar en razón a su hija. Crates la intenta disuadir, y no se le ocurre otra cosa que desnudarse ante ella y mostrar sus defectos físicos ( era jorobado) -He aquí el esposo, he aquí sus posesiones: decide; pues no podrás ser mi compañera si no compartes mi modo de vida.
Pero Hiparquía, no sabemos si impresionada por sus "posesiones", quien sabe :-) , no sólo no cambia de opinión sino que hizo lo mismo (desnudarse y mostrar sus "posesiones") y se marcha con Crates, casándose más tarde en una boda, cínica por supuesto. Crates e Hiparquia consuman su matrimonio haciendo el amor en un portal público. Con su acto público, reforzaban la enseñanza cínica por la cual cualquier acción suficientemente virtuosa como para llevarse a cabo en privado, no sería menos virtuosa en público (principio de anaideia)
Bueno pues toda esta culturilla viene a cuento porque Hiparquia dió también su nombre a un género de mariposas (familia Nymphalidae, subfam. Satyrinae) y hoy os voy enseñar una de ellas.
El género incluye varias especies bastante similares entre si (y similares a otros géneros afines también), espero no haberme confundido con la identificación, que me ha resultado un dolor de cabeza, porque yo realmente no veo tan claras las diferencias.
Al final creo que la de la foto es el sátiro común, Hipparchia semele
Es una mariposa grande, de hasta 6 cms de envergadura alar (aunque más pequeña que H. fagi o H. alcyone), muestra sobre cada ala delantera dos ocelos negros con centro claro (en la imagen sólo se ve uno), insertos en una banda anaranjada que destaca sobre el marrón de las alas, más visible en las hembras que en los machos (por lo que supongo que entre eso y la banda lanca más marcada, la de la foto será una hembra)
Al igual que buena parte de las mariposas del género Hipparchia, presenta en el reverso de las alas tonalidades marrones y grisáceas, en confusa mezcla, destacando, en reposo, un único ocelo (hay que fijarse bien)
Es una mariposa de amplia distribución y común en lugares herbosos y abiertos, y en brezales, hasta los 1500 metros de altitud. Es posible verla sobre las flores del tomillo, pero su posición normal de reposo es en el suelo, con las alas cerradas y apuntadas hacia el sol. Bonita,¿verdad?
Las orugas son amarillas, con rayados marrón y amarillo mate. Se alimenta de diversas hierbas, y supera el invierno a medio crecimiento.
Su conducta fue ampliamente estudiada por Nikolaas Tinbergen, científico holandés nacido a principios del siglo XX, etólogo y Premio Nobel de medicina en 1973, quien observó que durante los días soleados el macho (de tamaño algo menor que la hembra) se coloca en un observatorio que ha elegido previamente, normalmente en el suelo, y permanece absolutamente inmovil hasta que detecta la presencia de otra mariposa.
En ese momento inicia un repentino vuelo en dirección al invasor. Si se percata de que se trata de un ejemplar de otra especie normalmente interrumpe la persecución, pero si es una hembra la persigue sin tregua hasta que ésta opta por pararse.
Entonces el macho hace lo propio y se aproxima a pie hacia aquella, el macho comienza a ejecutar una complicada parada nupcial en la que se pasea en torno suyo, realiza movimientos espasmódicos con las alas o signos con las antenas, que son respondidos por la pretendida.
Dentro de este ritual, Tinbergen descubrió que, en un momento dado, el macho acogía entre sus alas anteriores las antenas de la hembra, descubriendo posteriormente que con ello le estaba facilitando a esta la posibilidad de establecer contacto "olfativo". Si todo funciona a gusto de ambos, se inicia la cópula.
Pero (siempre hay un pero) resulta que la hembra se aparea una sóla vez y el macho, hasta que no es admitido o rechazado no está en condiciones de saber si su pretendida es o no "virgen".
Analizado este comportamiento por Tinbergen, descubrió que todo el comportamiento de persecución era de carácter sexual (si las hembras sólo se aparean una vez es fundamental ser el 1º en pillar) y que dentro de éste el macho de Hipparchia semele responde a estímulos visuales. Sometió en miles de ocasiones a machos de semele al experimento de acercarles mariposas de papel (luego sólo serían meros papeles de diferentes tamaños y colores) sujetas con un hilo a un bastón de aproximadamente un metro de longitud y conseguía que los incautos machos cayesen en la trampa.
De este modo se explica que cuando desde su observatorio descubre la proximidad de otro lepidóptero (u otro insecto o los papeles de colores) se abalanza sobre el visitante no por instinto territorial o de defensa, sino porque cree identificar a una posible compañera con la que aparearse. Muy de acorde con el caracter de Hiparquia no? :-))
3 comentarios:
Jolines, qué historia! Tengo que leer más a los griegos...
Interesante mujer, interesante historia, interesante símil... comentarios interesantes.
Buena entrada, Furacán!.
Maremia con el principio de anaideia... y con la conducta sexual de los lepidópteros!!!!!
Veo que tienes muchas seguidoras en este blog!!!!!
;-)))))
bikiños!!!
Publicar un comentario