jueves, 18 de junio de 2009

Convulvulus arvensis

La correhuela es una planta perenne ("muere" en invierno pero sus partes subterráneas perduran durante años), herbácea, rastrera y trepadora que se desarrolla hasta una altura de 0,5 a 2 m. No hay que confundirla con la correhuela mayor, que es muy muy semejante pero pertenece a un género distinto (Calystegia), se diferencia fundamentalmente porque Convulvulus carece de bracteolas.
El nombre de Convulvulus significa "que se retuerce" y arvensis procede del latín arva = campo de labranza, lo que nos indica que se trata de una especie que aparece en campos cultivados, huertos... pero también márgenes de caminos y terrenos hollados algo húmedos. Otros nombres que se le ha dado son corregola (en gallego), camisola de la Mare de Déu (en catalán) o incluso pipalore (flor de pipa ;-)) en vasco (no es su denominación más común pero lo pongo en honor a un ilustre visitante del blog)


Sus hojas se distribuyen en espiral, son lineares con forma terminal de punta de flecha, de unos 2 a 5 centímetros de largo, con un peciolo de 1 a 3 centímetro.
Florece desde Mayo en adelante, hasta bien entrado el otoño. De la axila de la hoja emerge el pedúnculo de la flor, más largo aún. La flor de la correhuela tiene un cáliz pequeño y una gran corola simpétala en forma de trompeta, con un diámetro de 1 a 2,5 centímetros, de color rosa pálido, ó blanco, con cinco rayas radiales rosadas levemente más oscuras. Tienen 5 estambres y un estilo dividido en 2 ramitas. Estas flores pueden llegar a ser muy numerosas, de manera que en verano, pueden constituir una auténtica alfombra de flores.
El fruto es una cápsula ovoide y glabra.
Aunque son nativas de Europa y la zona templada de Asia, se han naturalizado en otras zonas del mundo. En Norteamérica por ejemplo está considerada como especie invasora en algunas áreas y una mala hierba, debido a que con su crecimiento puede estrangular rápidamente otras plantas cultivadas.
En algunas épocas ha sido consumida en infusión como purgante y laxante pero no es muy habitual.

2 comentarios:

la granota dijo...

Te la pones en la nariz, aspiras, y se te queda pegada como una graciosa narizota de payaso. Al menos eso hacíamos mi hermana y yo cuando éramos chicas. Obvia comentarios sobre los efectos secundarios :)

Furacán dijo...

jejeje tengo que probar a ver :-D