Este 2011 ha sido declarado como el año del murciélago por parte del Programa para el Medio Ambiente (PNUMA) de la ONU y la verdad es que ojeando el blog me he dado cuenta de que no le había dedicado ninguna entrada. En parte por mi propia ignorancia ya que a pesar de ser unos animales muy familiares, sus hábitos y su forma de vida así como la gran cantidad de especies existentes hacen que no sea fácil de abarcar. Yo por lo menos apenas sé distinguir las especies (quietecitos y con la guía delante aún jeje pero en vuelo...)
Bueno, pues para paliar esto, les voy dedicar esta entrada (y quizás alguna más) a estos animales tan interesantes. Hay mucha información en la web, así que me limitaré a comentar algunos aspectos llamativos de su biología. Espero que os resulte interesante. Quizás a los que estáis un poco en el mundillo o hayáis visto otros blogs con esta temática os aburra y os resulte repetitivo pero creo que para la gran mayoría de la gente estos mamíferos son muy desconocidos.
Lo primero que hay que decir es que son mamíferos placentarios (¡como nosotros!, ahora es evidente pero hasta la época de Linneo se consideraban pájaros) y que se agrupan en un orden denominado Quirópteros (del griego quiro χείρ, χειρός= mano + pteron πτερόν= ala; lo que ya nos da idea de que va la cosa)
Aunque no os lo creáis representan en número de especies nada más y nada menos que el 20% de todas las especies de mamíferos (sólo los superan los roedores) Hay más de 1000 especies y están presentes en todos los continentes, salvo la Antártida claro. Juegan un destacado papel en las redes tróficas y algunas especies son muy importantes como polinizadores y dispersadores de semillas.
Son los únicos mamíferos capaces de volar (de forma natural claro está) siendo además su principal forma de locomoción. También pueden caminar pero de forma muy torpe, seguro que lo habéis visto. Hay excepciones, por supuesto, Desmodus rotundus, uno de los murciélagos vampiros es capaz hasta de correr.
Su mecánica de vuelo es compleja, los huesos de las alas se doblan (el cartílago carece de calcio y otros minerales en su extremo, lo que les permite una gran torsión sin romperse) y generan un efecto similar al rotor de un helicóptero.
En función de su tamaño, los murciélagos pueden batir sus alas de 12 a 18 veces por segundo. No todas las especies vuelan de la misma forma aunque todas pueden maniobrar de una manera más rápida y precisa que las aves al poseer alas mucho más delgadas( aunque también son más delicadas) Especies que se alimentan de insectos voladores pueden llegar a lacanzar los 50 km/h. El vuelo batido conlleva un gran coste energético e implica una alta tasa metabólica que se traduce en un notable incremento de la temperatura corporal (alrededor de 40º C), y del ritmo cardíaco y respiratorio.
En vuelo, el Murciélago ratonero grande (Myotis myotis) alcanza las ¡800-900 pulsaciones por minuto! y las 4 ó 5 inspiraciones por segundo.
Todos los dedos de las manos excepto el pulgar están alargados y sostienen una fina membrana de piel, flexible y elástica, el patagio, que es lo que permite el vuelo.
El tamaño de los murciélagos varía desde los 29–33 mm de longitud y 2 g de peso del murciélago moscardón (Craseonycteris thonglongyai), el mamífero más pequeño existente en la actualidad, a los más de 1,5 m de longitud y 1,2 kg de peso del gran zorro volador filipino (Acerodon jubatus) En la Península los tamaños van de 3 a 5 cm de longitud y 8 g de peso del murciélago común (Pipistrellus pipistrellus) a 7-8 cm y 33-34 g de especies como el Murciélago hortelano (Eptesicus serotinus) o el Murciélago grande de herradura (Rhinolophus ferrumequinum)
Un dibujillo mío de un murciélago de la fruta Rousettus aegyptiacus
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Un mito bastante extendido es que los murciélagos son ciegos. De hecho la propia etimología de murciélago según la wiki es una metátesis histórica de «murciégalo», formada por la expresión del castellano antiguo mur cego «ratón ciego», la cual deriva a su vez de la unión de los términos latinos mus, ratón, caecŭlus (diminutivo de caecus), ciego, y alatus alado.
Pero nada más lejos de la realidad, los microquirópteros (los murciélagos insectívoros que tenemos por aquí) tienen una visión dicromática en blanco y negro, mientras que los megaquirópteros (zorros voladores, que se alimentan de fruta) ven en color. Vale que los ojos de la mayoría de los microquirópteros son pequeños y están poco desarrollados (para que lo iban estar si viven la noche jeje), y con una baja agudeza visual, pero no son ciegos, en todo caso cegatos jeje. De hecho incluso utilizan la vista como ayuda en la navegación, especialmente en distancias largas, a las que no alcanza la ecolocación.
Precisamente la ecolocación es otra de las características del grupo más conocida aunque no es exclusiva (también la poseen delfines y cachalotes) ni universal (los megaquirópteros no poseen esta habilidad salvo una especie que además lo usa de forma distinta)
Como ya digo la habilidad esta es conocida desde hace mucho tiempo, ya el famoso
Lazzaro Spallanzani observó en 1793 que evitaban obstáculos cuando estaban cegados pero que se desorientaban si no podían oír. Sin embargo hasta finales de los años 30 no se averiguó el mecanismo al descubrirse que emitían ultrasonidos.
Estos sonidos se emiten mediante contracciones de la laringe y pueden variar en frecuencia, ritmo, duración e intensidad. Las distintas especies emiten frecuencias diferentes.
Por ejemplo los murciélagos de herradura (Rinolófilos, ver al final del post) emplean unos repliegues de la nariz para lograr una frecuencia constante y una duración mayor que la mayoría de murciélagos que los emiten por la boca.
Esto en cuanto al sistema emisor, en cuanto al receptor utilizan sus orejas para escuchar su propio eco (la orejas de los rinolófidos, pueden moverse independientemente la una de la otra, una prueba de lo sofisticado del sistema)
Calculan la distancia de la presa por la diferencia de tiempo entre la emisión del sonido y la recepción del eco, y la dirección la deducen por la diferencia entre la llegada del eco al oído derecho y al izquierdo.
Otro mito en torno a los murciélagos es su alimentación. Creo que cada vez menos pero ¡aún hay quien se cree que todos son chupadores de sangre!
Pues no, sólo tres especies (las tres de la familia Desmodontinae) son de hábitos hematofagicos. Aunque son conocidos como vampiros más que succionar lo que hacen es lamer la sangre de la herida que le practican a sus víctimas. Quizás su fama se deba las sustancias anestésicas y anticoagulantes presentes en su saliva que hace que su víctima ni se entere. De todas formas es raro que lleguen a desangrar a sus presas, la pérdida en cada ataque no suele superar los 20 ml (aunque es habitual que repitan víctima en días consecutivos)
Casi todos los murciélagos comen de noche y descansan de día, en sitios muy variados según las especies (cuevas, edificaciones, agujeros, grietas o al aire libre) Su metabolismo y constitución (ya vimos antes Tª corporales elevadas, pulso por las nubes, ect) hacen que si desarrollaran su actividad de día tendrían un importante riesgo de muerte por deshidratación.
Hay especies solitarias y otras, como Tadarida brasiliensis que forman colonias de 20 y hasta 50 millones de individuos (imaginaros todos los habitantes de España formando una sóla colonia)
En cuanto a la reproducción (siempre es lo más interesante y lo que más juego da :-)) los sistemas de apareamiento también varían de una especie a otra. El comportamiento sexual, exceptuando el de algunas especies, es no obstante bastante mal conocido. Algunas especies tienen un comportamiento promiscuo y se unen en grupos numerosos copulando con varios compañeros cercanos. Otros mantienen y defienden pequeños «harenes» de hembras. Pero también hay especies que son monógamas; el macho, la hembra y su descendencia viven juntos en grupos familiares y los machos, muy responsables ellos, pueden colaborar en la protección y alimentación de los jóvenes.
Suelen alcanzar la madurez sexual a los doce meses, y el comportamiento durante el cortejo es también muy variable, en algunas especies es complejo, mientras en otras son partidarias del "aquí te pillo aquí te mato". La cópula nunca se produce en vuelo. Mientras la hembra está suspendida del techo del refugio, el macho la agarra por la espalda, curvando el abdomen y apartando el uropatagio para encontrar la vulva. En ocasiones se produce cuando la hembra está levemente despierta, pero no lo suficiente como para volar. En el transcurso de la cópula la pareja articula pequeños sonidos de vez en cuando y en ocasiones el macho muerde los pelos del cuello de la hembra. Permanecen en esta posición durante alrededor de veinte minutos, durante los cuales puede producirse la cópula varias veces. En el murciélago hortelano (Eptesicus serotinus), puede durar tres o cuatro horas. Parece que en algunas especies puede continuarse la cópula en estado de dormición, gracias a la existencia de un tejido eréctil especial del pene. En los Rinolófidos el esperma forma un núcleo duro que actúa como una especie de tapón vaginal.
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Los testículos del macho de la especie de murciélago de la fruta Rousettus aegyptiacus tienen un tamaño que representa el 2,15% de su masa corporal total (mientras que sus cerebros apenan suponen el 1,70%) El macho de algunas especies de murciélago puede llegar a tener testícuos cuyo tamaño alcance hasta un 8,5% de su masa corporal total ¡No es photoshop! Crédito foto: Mark Bartosik.
Otra curiosidad en algunas especies es la práctica habitual del sexo oral, cosa que quizás os suene porque un
trabajo en este campo (que a mi me parece muy interesante) ganó uno de esos premios antinobel o como se llamen.
Os pongo algo más de bat-porn a continuación.
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En muchas especies, tras las cópulas, los espermatozoides permanecen vivos en el trácto genital de la hembra hasta la primavera en la que se produce la ovulación y fecundación ¡Los espermatozoides son, después de 6 meses, perfectamente viables para cumplir su misión!
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A sus cosas...
En un principio se pensó que esta adaptación reproductora era única para los quirópteros dentro de los vertebrados superiores, pero estudios posteriores han revelado mecanismos similares en los roedores y lagomorfos. Esta pauta reproductora es característica de la mayor parte de los murciélagos europeos.
Otra adaptación peculiar de algunos quirópteros, como el murciélago troglodita (Miniopterus schreibersii) que habita en nuestro país es la implantación retrasada o aplazada. En este caso la ovulación tiene lugar en otoño y la fecundación se produce poco después, ya que se trata del momento de las cópulas. Entonces el cigoto resultante sufre las primeras divisiones embrionarias y en ese momento cesa su crecimiento. El blastocito permanece en estado de letargo en el útero, no aconteciendo la implantación hasta la llegada de la primavera siguiente. Este aplazamiento en la continuación del desarrollo embrionario puede durar hasta cinco meses.
En realidad poseen una tasa reproductora sorprendentemente baja, si la comparamos con la de otros mamíferos de su mismo tamaño: tienen una cría y en algunos casos dos al año. Las especies de zonas templadas forman generalmente colonias de maternidad, algo así como guarderías integradas casi exclusivamente por hembras adultas; este comportamiento reducenla pérdida de calor y el gasto energético de cada individuo. La mayoría de los murciélagos, sobre todos los insectívoros dejan a sus crías en las perchas mientras se alimentan y generalmente sólo las llevan encima cuando cambian de percha.
La longevidad de los mamíferos generalmente está en relación con su tamaño, de media suele ser de cuatro o cinco años, aunque a menudo alcanzan diez y algunas especies pueden llegar a vivir 25-30 años.
En la Península Ibérica viven en torno a 30 especies. A las 25 especies conocidas hasta hace pocos años que aparecen en fauna Ibérica se han unido al menos otras 3 descubiertas recientemente (Myotis alcathoe, Plecotus macrobullaris, Pipistrellus pygmaeus), y quizás ya haya alguna más, no he encontrado datos actualizados.
Se reparten en 4 familias: Vespertilionidae (22 especies), Rhinolophidae (4 especies), Miniopteridae (1 especie) y Molossidae (1 especie).
-Familia Rhinolophidae:
* Rhinolophus ferrumequinum (Murciélago grande de herradura)
* Rhinolophus hipposideros (Murciélago pequeño de herradura)
* Rhinolophus euryale (Murciélago de herradura Mediterráneo)
* Rhinolophus mehelyi (Murciélago mediano de herradura)
- Familia Vespertilionidae:
* Myotis mystacina (Murciélago bigotudo)
* Myotis emarginata (Murciélago de oreja partida)
* Myotis nattereri (Murciélago de patagio aserrado)
* Myotis bechsteinii (Murciélago ratonero forestal)
* Myotis myotis (Murciélago ratonero grande)
* Myotis blythii (Murciélago ratonero mediano meridional)
* Myotis daubentonii (Murciélago de ribera)
* Myotis capaccinii (Murciélago patudo)
* Pipistrellus pipistrellus (Murciélago enano)
* Pipistrellus nathusii (Murciélago enano de bosque)
* Pipistrellus kuhlii (Murciélago de borde claro)
* Hypsugo savii (Murciélago de montaña)
* Nyctalus leisleri (Nóctulo menor)
* Nyctalus noctula (Nóctulo mediano)
* Nyctalus lasiopterus (Nóctulo gigante)
* Eptesicus serotinus (Murciélago de Huerta)
* Barbastella barbastellus (Murciélago de bosque)
* Plecotus auritus (Murciélago orejudo dorado)
* Plecotus austriacus (Murciélago orejudo gris)
- Familia Miniopteridae:
* Miniopterus schreibersii (Murciélago de cueva)
- Familia Molossidae
* Tadarida teniotis (Murciélago rabudo)
Hay muchísimas páginas en la web con cosas muy interesantes, por si a alguien le interesa el tema: